Al fin has tenido un poco de suerte y ya tienes el trabajo que tanto te mereces! Aunque yo estoy destrozado, me alegro mucho por ti!
Desde hace unos días discuto conmigo mismo y me llamo egoísta por no estar completamente contento pero no puedo hacer nada… Aunque es muy injusto, hoy deseo que no hubieses cogido la llamada que te llevó a esa entrevista y ojala no fueses tan buena en tu trabajo…
Ahora ya pensaba en doble, éramos siempre dos, no estaba sólo y no te imaginas cuánto he disfrutado de estos dos meses teniendote cerca...
Esta vez es diferente, lo sé, pero volvemos a estar separados… Odio cada milímetro que forma los centímetros de cada conjunto de metros de los kilómetros que no nos dejan estar juntos…
Debería estar contento por ti y lo estoy, no te imaginas cuanto, pero no sabes lo triste que es para mi no tenerte aquí…
Ya éramos una pareja normal, aunque mirándolo bien, ¿cuándo nos ha importado a nosotros la normalidad? Pero era tan bonito hacer cualquier cosa si estabas tú…
Volveré a depender del maldito teléfono para saber de ti, volveré a esperar como un loco el sonido que me permite escucharte y volveré a soñarte cada día como desde el día que te conocí…
Los días volverán a ser largos y los minutos perderán de nuevo su rapidez. Mis días volverán a estar vacíos y desearé dormirme para poder verte a mi lado…
Mucha suerte en tu nuevo trabajo mi vida, seguro que lo haces muy bien!
Te echaré tanto de menos…
